La selección clasficó con puntaje ideal a los cuartos de final de la copa América, quedó primero en el grupo y tendrá que enfrentar a Perú por cuartos de final.
En un encuentro con mayoría de suplentes, el equipo de Basile logró superar al dificil Paraguay de Martino. Con cambios claves a los 21´del segundo tiempo, Mascherano por Lucho González y Messi por Cambiasso, argentina logró tener mayor profundidad y atacó con más claridad.
Antes de los cambios, Aimar estuvo muy impreciso al igual que Lucho González, Palacio, Gago y Tevez. Los encargados de crear juego erraron mucho y decidieron mal los pases. Con el ingreso de Messi, Aimar y Tevez se sintieron más comodos y empezaron a asociarse lastimando la defensa paraguaya, que hasta entoces tenía bien controlados a los delanteros, especialmente con la muy buena actuación de Cáceres. Será lo que transmite la Pulga que con sus ganas, sus gambetas y su afán de ir siempre para adelante, contagia. El equipo tomó otra actitud, empezó a asociar a Tevez con Messi y Aimar y a partir de ahí a gestar la merecida victoria. EL otro cambio clave fue el de Mascherano, el que siempre corre, recupera, releva y juega, esta vez jugó y con mucha clase en la definición marco el gol que le dió el primer puesto al epuipo.
Claro que tenemos en cuenta que eran los suplentes. Pero cuando en cancha están Tevez, Palacio, Aimar, Lucho, Gago y Cambiasso, uno se entusiasma y también pretende actiud ofensiva y buen juego. Actitud hubo, lo que faltó fue el toque final que se lo dieron los que entraron y ese es el camino que la selección necesita para, además de ganar, gustar.
Especulaciones: No se dió tanto en el grupo de Argentina, pero un detalle para para los genios organizadores. El tercer partido de la primera fase se tendría que jugar en simultaneo, seguramente es menos redituable, pero piensen en el espectador, en el televidente, en el que sostiene realmente todo su negocio.
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